Es de mañana y ya hace calor; por suerte papá nos armó la pileta. Igual, antes del mediodía llama Sebas y nos dice que la nona nos espera a comer. No lo dudamos, nos divertimos más los tres juntos que por separado.

A las doce del mediodía tocamos el timbre de la casa de la nona... sobre la hora. Es entrar y ser invadido por esos aromas a cosas ricas. Y la sopa... porque pueden hacer 40° grados a la sombra, pero al nono nadie le quita su plato de sopa. Bromeamos. La nona es seria, en la mesa no se juega. El nono sonríe de costado, más con esa mirada cómplice que otra cosa.

Hay que dormir la siesta. Obviamente no queremos, lo único que deseamos es entrar ya en la pileta. La nona dice que con el sol de la tarde ni hablar.

Pero si el nono nos armó la pileta bajo la pergola, Nona... -digo con esa actitud de abogado del diablo que tanto me caracteriza. Está a la sombra...

Llegamos al acuerdo de descansar una hora. Ni un minuto más tarde, los tres adentro del agua. Comienzan los juegos, los gritos, quién nada mejor, quién se tira desde el borde, quién aguanta más abajo del agua. La confusión es mucha y el volumen de las voces aumenta. Sale el nono al jardín para reprendernos. Pantalón de vestir, medias, zapatos acordonados muy lustrados y camiseta blanca. Bromeamos por ello, lo desafíamos a que entre él también a la pileta con nosotros. No quiere, hace como que está enfadado. Sebas y Juan le hacen burlas, y mi risa retumba por toda la casa. Toma el escobillón de la nona, como si no supiéramos que no es capaz de doblarnos ni un cabello. Igual hace como que nos dará con él. Calcula mal y lo golpea con el borde de la pileta, doblándolo a mitad. Ha roto el escobillón de la nona. Ahora la que grita es ella, pero no contra nosotros.

Seguimos jugando y riendo; en un rato será la hora de la chocolatada fría y el pan con manteca. Adoro estar en la casa de mis nonos.

(Escribe sobre un recuerdo de infancia, todo... todo lo que recuerdes.)

8 comentarios:

  1. Me hiciste lagrimear. Abrazo grande Taña ��

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    1. Ainsssssssss Hugo... no lagrimees que a mí en estos tiempos cualquier excusa me viene bien...

      Besotes flaco!

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  2. Que bella la infancia Alma, con la familia , los juegos y como cambia todo cuando crecemos

    Besos grandes

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    1. Infancias como la mía son de repetir... esos años me han dejado hermosos recuerdos...

      Besotes Precious.

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  3. Un bello retrato de la infancia, donde no importa más que divertirse y disfrutar.

    Besos dulces Alma y dulce semana.

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    1. Gracias Dulce... años en donde se era feliz y, tal vez, no lo sabíamos...

      Besos grandes como el mar.

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  4. nena... mi pileta era igual,solo que mis nonnos,no decían ni mú! ajjj qué recuerdos de ese jardín de Vicente López...
    GRACIAS.

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    1. La famosa "Pelopincho"... jajajajajajaja!!

      Smu@ckssssssssssssssssssss!

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Tus huellas también las siento...