Alguna vez leí del gran Gabriel García Márquez:
"Con el tiempo todo pasa.
He visto, con algo de paciencia, a lo inolvidable volverse olvido,
y a lo imprescindible, sobrar."
Sólo creo que una cosa le falta a esto, que uno decide hasta cuándo.
Hasta cuándo querrás recordar, hasta cuándo le dedicarás tu mirada al pasado, hasta cuándo valorarás a quien no lo ha hecho contigo, hasta cuándo condicionarás tu hoy por tu ayer.

Yo he aprendido hace mucho que la vida es demasiado corta. Dejo que el tiempo haga su trabajo, pero meto mi granito de arena en no mirar hacia atrás. Lo que haya quedado en mi pasado, sus razones tendrá... y ya no las busco ni trato de explicar.

Vivo hoy... ahora... con suerte, aún me atrevo a soñar con mañana. Porque los puntos suspensivos me gustan para escribir, pero en la vida, cuando llega el momento, digo "yo ya no" y pongo punto final(.)


Llueve otra vez.
En el vidrio de mi ventana, tu reflejo...
...un espejismo en realidad,
pero me llena, me abraza.
Porque eres tú,
siempre fuiste tú.


Si sólo te detienes a ver
puedes creer lo que no es
porque en realidad
todo(s) miente(n).

Yo también mentí,
cuando (me) dije que vos eras diferente
y sólo terminaste siendo uno más,
tan igual al resto
que ya [te] estoy borrando
(de) hasta mis recuerdos.


(Pensamientos en una tarde cualquiera frente al mar después de la tormenta...)

¿Piensas en mí alguna vez?
¿Aún me ves entre la gente cuando vas al trabajo?

Yo admito que te pienso,
ya sabes, siempre fui de buscar respuestas.
Pero ya las he encontrado.

A ti te dejo las dudas,
la pregunta de ¿qué hubiese sido?
la certeza que nunca lo sabrás.


...quédate imaginando.
Hola... ¿cómo estás?

Así empezaban siempre nuestras conversaciones; porque a vos no te importaba qué estaba haciendo, sólo querías saber cómo me sentía... Y yo te decía que estaba bien, a veces cansada, la mayor parte que estaba a mil. Pero la verdad es que no quería detenerme mucho a pensar en la falta que me hacías... Y casi lo lograba, al menos hasta el momento, que así como si nada, me soltabas un "te extraño" e irremediablemente me rompía... o yo creía que eso era romperme.

Nunca te lo dije, pero te juro que en esos momentos podía sentir tus manos tomando las mías... Y hoy daría lo que no tengo para sentirlas una vez más.

Si hubiese sabido que esa sería la última vez, te habría abrazado fuerte y no te habría soltado más.

Ahora sí estoy rota... y así sigo día tras día. Me rompí hace diez meses y no logro recomponerme. No lo digo, me cuesta hablarlo, nunca fui buena para contar de mí.

Todas las noches miro tu foto, sigue allí, delante de mi cama. Espero me vengas a visitar en un sueño, y espero poder recordarlo, al menos esa vez. Aún no he cancelado nuestras chat, como si vos pudieras escribirme desde donde estás... espero me preguntes: "Hola...¿cómo estás?" y yo te prometo que no dudaré en responderte: "...aquí ...extrañándote cada día más."


(16/Noviembre/1992 - 09/Enero/2019)


Cerré puertas y ventanas.
Quemé de mi memoria todas esas frases,
vacías, sin sentido ni latido.
Hace mucho que aprendí a curar sola mis heridas
y también así a librar mis batallas.
Lo que no fue, ya no será.
Y tampoco me interesa.
Porque mis verbos van conjugados en presente,
y los que no están hoy,
juro que no estarán mañana.



De él, la culpa es de él. Del último de la lista. De los demás nadie se acuerda o a pocos interesa.
Porque la verdad es esa, no importa si antes te han mentido; te han robado; te han defraudado; si te han calpestado los sueños; si te han llenado de miedos; si te han llevado a límites insospechados; si todo aquello te ha matado y puesto tu ser en una caja... porque la culpa, la culpa seguro la tiene aquel que ha puesto los clavos en el ataud.
Y así se sigue, viendo a los demás y sus horrorosas sombras de defectos, pero negando el propio reflejo, el mismo que muestran la memoria y la conciencia... pero se sigue, se sigue y se sigue, más por soberbia que por algún otro sentimiento más noble y altruista; porque al final todo da igual, todo(s) es(on) lo mismo.



"... No hay aplazaos ni escalafón;
los inmorales nos han igualao.
Si uno vive en la impostura
y otro roba en su ambición,
da lo mismo que si es cura,
colchonero, rey de bastos,
caradura o polizón ..."



A veces la distancia duele, como hoy
donde uno quisiera, no volver, eso ya está perdido,
sino traerse consigo a todos aquellos que ama.


Por un momento todo fue perfecto.
Él estaba bien; hacía lo que le gustaba. Y yo, pues yo me divertía también.
Nos escribíamos, nos provocábamos, nos deseábamos.
Una foto de ida y otra de vuelta.
Por un momento todo había vuelto a ser como siempre había sido.
No había dolores, no había enfermedades.
No habían feos presagios, ni proyectos derrumbados.

Después...
Después es hoy, es lunes y todo vuelve a comenzar.


No puedo, ni quiero, decir de qué deberían estar orgullosos los demás... yo sólo sé de qué estoy orgullosa yo. Cada uno sabe sus pasos por esta vida.



(Piensa en las personas que son importantes para ti, ¿de qué deben estar orgullosos?)

Si supiera que no puedo fallar, que todo resultaría como lo espero...


...tendría otr@ hij@.


(¿Qué intentarías hacer si supieras que no puedes fallar?)

No soy una de imaginarme el futuro, prefiero vivir el momento. Pero de hacerlo, creo que al final de mi vida me habría hecho feliz las personas que he amado y me han amado. Las muchas cosas que he aprendido y las pocas que he podido enseñar. Los libros que he leído, la música que he escuchado, las películas que he visto, los viajes que he realizado, las comidas que me he gustado.























(Imagínate a los 90 años, ¿qué te ha hecho feliz?)

Yo no soy de las que piensa que la vida es dura. Es como es, a veces complicada, a veces un paseo... diferentes melodías que uno tiene que bailar.

Cómo lo hagas es tu elección. Y cómo sea que te vaya, es tu vida.





























(Si piensas que la vida es dura, ¿con qué la estás comparando?)

Nunca me detuve a pensarlo.

Seguro me llevaría un libro, "Historias de Cronopios y Famas" de Julio Cortázar.
Un protector solar, al menos para los primeros días, hasta que la piel se "curta" del sol.
Y después... después no sé, no se me ocurre nada...





























(Describe 3 cosas que te llevarías a una isla desierta.)

[Desde hoy y hasta el viernes se publicarán las últimas 5 entradas que ya estaban escritas y programadas hace tiempo; pero luego dejaré este espacio para esas letras que reflejen mis estados de ánimo; esas que me salgan sin filtros ni estructuras; las que no siguen retos ni consignas; las que no tendrán fechas precisas, y que, tal vez, no sean ni siquiera comprendidas... esas letras que serán otras huellas de (mi) Alma, "Otras huellas en la arena..."

...gracias por seguir allí; aunque sólo me leas; por esa compañía silenciosa; por, simplemente, estar.]

Hay veces, temporadas, años enteros, que todo parece ir al revés. Todo es un golpe detrás de otro, sin que puedas tomar aire. Y, cuando lo haces, no es suficiente, porque algunos de estos golpes son tan duros que necesitas tiempo para aceptarlos. No digo comprenderlos, porque creo que eso es más que difícil en algunas circunstancias. Pero si no los cuestionas, si te les paras de frente y les dices: "ok... esto es lo que hay... y yo te daré pelea.", entonces necesitas de todo el coraje que se es capaz. Y sonríes hasta cuando no tienes ganas, porque sabes que de esa sonrisa dependen tantas otras cosas... dependen esas personas a las que amas.

Aún así, hay días que no puedes, que tienes cansada el alma y no sólo el cuerpo. Porque en fin de cuentas somos seres humanos, con nuestros defectos y fallas; y nos llenamos de miedo, porque es inevitable pensar a lo que podría pasar si todo anduviese definitivamente mal...

...y entonces levantas la vista y te das cuenta de no estar sola. Están esas personas, esas almas igual a la tuya, con sus problemas, con sus dolores, con todas sus circunstancias, pero que están allí, a tu lado. Con una palabra; con un correo donde sólo te preguntan: "¿Y tú cómo estás?"; con un abrazo de esos que a ti te gustan, esos de oso; con una canción; con gestos...


Eso fue lo que recibí ayer. Cuando me sentía tan agotada que ni siquiera notaba que lo estaba, un mimo llegado por correo hizo que me rompiera en llanto. Aunque fueron esas mismas lágrimas las que unieron cada trocito, porque eran lágrimas llenas de amor; de saberse, de sentir que no estás sola. Y yo sólo puedo decir gracias... gracias Ale por tanto y tanto que me das, día a día, en todo momento; por sostener mi mano y acariciar esas alas que a veces se resisten a desplegar y levantar vuelo. Gracias por dejarme ser parte de tu vida y por ser parte de la mía.

Te quiero hasta la Luna y de vuelta.



Por más que he estado pensando, pensando y pensando...
no he logrado recordar una reciente primera vez.
Lo que significa que ha pasado mucho tiempo, demasiado...






...debería remediar.















(¿Cuándo fue la última vez que hiciste algo por primera vez?)

"Nunca tengas miedo de hacer una pregunta,
especialmente a ti mismo.
Descubrir es la misión de la vida."
(Brian Kates)



(Escribe la frase)

¿Hace falta que lo diga? ...quien me conoce bien, sabe que amo el mar ...él me calma y me da fuerza ...y, aunque es agua, me incendia ...difícil explicar con palabras lo que siento cuando me toca, cuando me sumerjo en él y renazco nueva.



(Nuestro entorno físico tiene una gran influencia en nuestro humor.
Describe un lugar que te haga sentir bien.)

¿Hay algo de lo que te arrepientes?
¿Qué volverías hacer, aún si el resultado no ha sido de lo mejor?
¿Tienes sueños aún?
Si tuvieras que partir mañana, ¿cuál sería tu destino?
Si alguna vez has hecho algo irracional, de impulso, ¿qué ha sido?




(Escuchar es un acto de amor.
Escribe 5 preguntas que te gustaría hacerle a un ser querido.)

Por un tiempo he hecho trabajo voluntario, lo hacía en un hogar para ancianos. Era al inicio de mi llegada en Italia y estaba sola, entonces iba a este sitio a darles de comer a los abuelos que no tenían a nadie que los ayudara... y volvía a la tarde a hacerles compañía, a leerles el períodico, o los llevaba a dar una vuelta a aquellos en sillas de rueda. Me gustaba hacerlo, aún si había días que todo me generaba muchísima angustía. Lo sentía como la rueda que había girado, antes eran ellos a asistirnos y ahora era yo a devolver todo.




(¿Haces trabajo voluntario? Si es que lo haces, ¿qué amas de hacerlo?
En caso de que no, ¿qué causas defiendes con mayor pasión?)


Para ser sincera, no soy una que hable públicamente de política; de hecho en los últimos años no lo hago ni siquiera en privado... sólo si conozco muy bien y considero un amigo a quien tengo delante. Sino, directamente dejo pasar. No me interesa comentar ni cambiar opiniones; no quiero convencer a nadie de nada, y tampoco quiero que me vendan ninguna moto.

Así y todo, también en todos estos años que vivo en el exterior, alguno se ha sentido con el derecho de subirse a algún pedestal e impartirme "clases", de vida, de fe, de política, de filosofía... (de esta última, si supieran, pensaran y reflexionaran un poco más y hablaran un poco menos, sería fantástico); como si el hecho de vivir afuera me prohibiera automáticamente el derecho de opinión sobre el sitio que me vió nacer y crecer. O como si por este simple motivo, yo fuera ajena a esa realidad que dejé en la otra orilla. Pero, como leía los otros días en un blog amigo que admiro, el sentido común es el menos común de todos los sentidos... y por mis tierras, una vez más, han dado sobradas muestras.

Creo que la distancia, el conocer y vivir otras realidades, otras costumbres, no sólo te abre la cabeza, hace que te replantees tantas cosas, sino que te hace ver todo desde otra perspectiva... y desde ahí es más fácil distinguir cuando te quieren cambiar el oro por espejitos de colores...


Y como éste es mi espacio, y no le falto el respeto a nadie, escribo lo que pienso y siento... y al que no le guste, hace a menos de comentar y amigos como siempre, porque repito, no busco polémicas ni nada, sólo sacarme una piedra del zapato, una piedra llamada decepción... y que, lamentablemente y con dolor, trajo a mi memoria esta escena que cada vez comprendo más.
















No podría pasar un día sin música...





(Completa la frase "No podría pasar un día sin...")








Hoy no hay consignas...
no hay frases hechas...
no hay cosas establecidas...




Hoy simplemente me vuelvo a parar delante la vida...
estoy lista...
ni un paso atrás...

Carpe diem...
...no podría ser otra.


(Si tuvieras que escoger un lema para tu vida, ¿cuál sería?)


No recuerdo con exactitud cómo me sentía un año atrás... sí sé que estaba con mi sobrina de visita, por lo que supongo estaría feliz, paseando y recorriendo con ella.

Hoy... hoy es diferente. Hoy pasaron muchas cosas, muchos golpes, algunos inesperados, que marcaron heridas profundas... pero, pese a eso, aún tengo ganas de poner la cara al sol y esperar... porque lo que tenga que llegar, llegará y, sea lo que sea, tendré la fuerza de enfrentarlo.




(¿Cómo te sentías hace justo un año? y ¿cómo te sientes ahora?)

Pues espero que dentro del pecho, del lado izquierdo...

(disculpen, pero es lo primero que se me ocurrió al leer... jajajajaja!)




(¿Dónde se encuentra tu corazón en estos momentos?)

Siempre he sabido disimular bien, muy bien aquello que sentía... esto en bien y, obviamente, en mal. Por eso, aunque nadie lo sepa o jamás lo haya podido adivinar, desde que era niña y hasta hace unos años atrás, mi mayor miedo era el que "me dejaran"... quedarme mirando una ventana mientras alguien se marchaba irremediablemente...
Pero lo dicho, es algo ya superado, porque he finalmente comprendido que existe sólo una persona indispensable en mi vida: yo... aún si puede sonar a egoísmo.



(¿Cuál era el miedo más grande que tenías de niñ@? ¿Lo has superado?)





Si pienso a mi forma de ser, a mis gustos personales, a cómo enfrento la vida... me siento más joven de mi edad biológica. Pero, si en cambio hago una lista de todas las cosas vividas, de las experiencias por las que he pasado... creo que habría que sumarle al menos veinte años a aquello que indican mis documentos.

De igual modo, estoy bien con mis sonados 43 años...




















(¿Te sientes más viejo o más joven de lo que tu edad biológica indica?)

Yo soy las mujeres que me precedieron; los hombres que me enseñaron lo que sí, lo que no, lo que nunca. Yo soy los libros que he leído, la música que he escuchado y las películas que he visto. Yo soy la tierra que me ha visto nacer, las calles donde crecí y el mar que amo. Yo soy el aire que llena mis pulmones y el fuego que corre por mis venas. Yo soy todos mis errores y todas las veces que he caído de rodillas... pero también soy cada uno de mis aciertos y, sobre todo, cada una de las veces que me he vuelto a levantar después de un golpe.

Yo soy... simplemente Alma pero no un alma simple.



(Termina la frase "Yo soy...")


























¿Un libro? ¿Uno solo? ...imposible!!!!!!!!!
Yo tengo una lista interminable de libros que quiero leer, y por uno que borro de ella, agrego otros dos... u otros cinco.







(Nombra un libro que has querido leer desde hace mucho tiempo, ¿por qué?)

Escucho muchísima música y de muy variados géneros... me paso todo el día escuchando algo, cuando trabajo, cuando escribo, cuando hago las tareas de casa, cuando hago ejercicio... siempre, en todo momento... y el tipo de música que escucho depende de cómo me sienta... me puedo pasar horas sea con melódico en español, como música italiana o conciertos en piano de clásica... lo importante es que la música no deje de sonar; porque ella me transporta, me hace soñar, imaginar que algunas canciones son para mí, por mí... y (el) Alma vuela...














(¿Cuál es el género musical que más escuchas? ¿Qué te hace sentir?)

Él...
...siempre ha sido él a dejarme fascinada.


(¿Qué te fascina?)

Siempre me he sentido un ser libre, una mujer libre...


...y siempre, siempre lo seré.



(¿Te sientes libre? Si no, ¿qué hace te sientas anclado?)





















La fuerza la saco de la convicción que no me rendiré sin luchar... y eso es ya una victoria.






(¿Qué te da fuerza?)

Porque entre vos y yo no hacen falta palabras; sino una mirada, un gesto, un abrazo...
Porque vos sos mi mejor amiga, y qué significa eso sino la hermana que me dió la vida...
Porque qué podría desearte yo en este y todos los días sino lo más extraordinario y maravilloso, ya que menos no sería suficiente...
Porque no hay un sólo día que no agradezca tenerte en mi vida...
Porque te estoy y me estás, siempre y a pesar de cualquier distancia...
Porque es hoy, porque será mañana y el día después de mañana aún...
Porque te amo...


...feliz cumpleaños Na!

Me quedé dormida...
...en los últimos meses el tiempo se me escapa de las manos, pero no me olvidé, no podría hacerlo.

Salí de casa apurada, quería un café especial y algo dulce para festejarla, ella se lo merece...


...y aquí estoy, espero que me aceptes este gesto pequeñito pero hecho con todo cariño.

Para ti Auro





Es imprescindible tomarme un tiempo sólo para mí, para lo que me gusta hacer, aunque más no sea estar sola leyendo un poco...




(¿Te tomas tiempo sólo para ti?)

La esperanza de un nuevo día y de que todo irá bien...



(¿Qué te hace sonreír hoy?)



Nada... no hay nada específico que esté esperando.


Y a su vez, podría también decir: todo... porque cada uno de nosotros siempre está esperando algo.


Lo importante es que mientras se espera, se continúe a ir hacia adelante.














(¿Qué estás esperando?)

Cualquier lugar y momento es bueno para una taza de té...


...por ejemplo ahora, que he vuelto,
¿qué te parece si te doy los buenos días con un té?




(¿Dónde es el mejor lugar para tomar un té?)


Cierro este blog por unos días.
Él me necesita. Yo necesito estar con él.
Cuando todo se calme, cuando la marea baje, volveré.



[Quien (me) quiera, sabe dónde encontrarme.]

"No trates a la gente tan mal como ellos te tratan,
trátalos tan bien como tú eres...
...porque cada quien da lo que es."


Hay frases que no tienen necesidad de ser explicadas... ésta es una de ellas.
Otra es una adaptación que he hecho hace mucho tiempo de un dicho popular:

"Donde la ignorancia y la maldad hablan;
la inteligencia y el don de gente callan."

A buen entendedor, pocas palabras
y tiempo al tiempo.
Mi desayuno favorito es "en" la cama...


...si también hay café y medialunas entonces ya es el máximo.





(¿Cuál es tu desayuno en la cama favorito?)

Se lo he dicho muchas veces, pero nunca las suficientes... gracias.





(¿Qué desearías decirle a tu mamá?)

Podría... pero no deseo hacerlo, ¿para qué? ...aún no es tiempo. Porque a pesar de la distancia, y que ella nos impide el día a día, es siempre una presencia.




(¿Puedes imaginar la vida sin tu mamá? ¿Cómo es?)

"Madre es un verbo, no un sustantivo."
(Proverbio)


Cuando leí el proverbio, enseguida vinieron a mi mente las palabras de F. B. Giacomin, que creo lo explique mucho mejor de aquello que podría hacer yo, por lo que me permito de traducirlas...

"-¿Cómo se conjuga el verbo 'madre'?
-No es un verbo.
-¿Están ustedes seguros?
-Amar; hacer; dar; escuchar; confortar; alegrarse; llorar; abrazar; besar; acariciar; sentir; curar; sostener; proteger; enseñar; acompañar; recordar; estudiar; leer; limpiar; cocinar; nutrir; vigilar; gritar; susurrar; cantar; sonreír; correr; saltar; educar; comprender; perdonar; padecer; angustiarse; aliviarse; sufrir; callar; hablar...
-Tienen razón... 'madre' no es un solo verbo, sino todos los verbos de una vida..."


(¿Qué significa el proverbio para ti?)

¿Talentos naturales? ...¿lista? ...no me hagan reír.




(Haz una lista de tus talentos naturales.)

Difícil elegir uno. Hay personajes que me gustan por algunas características, y otros por otras. Pero si debo hacerlo, mi primer respuesta, la más instintiva, es Scarlett O'Hara. Esa mujer que en el fondo nunca dejó de ser una niña mimada, algo caprichosa, pero con una fuerza capaz de superarlo todo... absolutamente todo...


...y sin contar que tendría a Rhett Butler!


(Si pudieras ser cualquier personaje, ¿quién serías?)

Nada... me quedo encantada frente al espectáculo que es el cielo entero, sin pensar en "buscar" ninguna forma oculta.





(Cuando volteas a ver las nubes, ¿qué ves?)